
Aunque en Colombia hace falta más inclusión de personas con discapacidad en trabajos de mayor importancia, en el Quindío es más abierta esa posibilidad de aceptación.
El consejero presidencial para la Participación de las Personas con Discapacidad, Jairo Raúl Clopatofsky Ghisays, estuvo en el departamento y se refirió a las políticas y normas a cumplir con este sector de la población.
Si bien, reconoció que falta mucha cultura en ese aspecto, dijo que en el caso del departamento es más factible trabajar, en comparación con otras regiones.
“En el Quindío es muy agradable trabajar, primero por su gente, así como su administración departamental porque han mostrado un buen trato para la población con discapacidad, además que tiene unas buenas prácticas de política pública, por lo que no tenemos que venir a enseñar al respecto”, expresó Clopatofsky Ghisays a este medio escrito.
Así mismo, destacó que el departamento tiene una buena política pública al igual que los demás entes territoriales que integran el Eje Cafetero.
“Es la actitud que tiene la población de la zona que hace que el trabajo con personas con limitaciones sea más fácil, es que los llamados público general saben que hay un grupo con necesidades a las que se les deben dar herramientas, ojo no es tenerle lástima, porque los que tienen limitaciones cumplen con unos deberes como los demás”.
Si bien es una región abierta falta mucho por cumplirle a esta comunidad: “Falta más en el transporte, en los andenes, la educación, la salud, en oportunidades laborales”.
Labor minimizada
Clopatofsky Ghisays expresó que, a pesar de que está en marcha la política pública, se ha visto a veces cómo se ha subestimado la labor y las propuestas en favor de las personas con inhabilidad de parte de los demás colombianos.
“Yo me recorro todo el país viendo políticas, es que amo este tipo de misiones, disfruto de ellas, pero, a veces, me dicen que por qué no soy ministro o adquiero un cargo mayor. Ese es el reflejo propio de lo que piensa la gente de esta población, cuando son 5 millones los habitantes del territorio nacional que tienen alguna limitación”, recordó el consejero presidencial.
Resaltó que junto con las personas con discapacidad existen cerca de 700.000 padres y madres cuidadoras que no son tampoco reconocidos.
“El Estado como sistema nunca los tuvo en cuenta y es la primera vez que nosotros dentro de un plan nacional de desarrollo los incluimos. Estamos trabajando en paralelo con la Cámara de Representantes y el Senado de la República para que tengan herramientas, subsidios e incluso el respeto que se merecen y esperamos que este año salga adelante”.

Indicó que la propuesta es muy parecida con la que cuentan las madres comunitarias, pero los cuidadores tienen otro tipo de tarea.
“La consejería ha tenido una articulación con los ministerios para impulsar normas en favor de esta población, nos queda un año y queremos desde la entidad dejar un gran legado”.
El desafío de la inclusión
Al consejero presidencial se le preguntó por qué es tan complicado que a veces una persona con discapacidad pueda asumir una responsabilidad de peso en Colombia y en ese sentido respondió que muchas veces los demás creen que nunca les pasará algo y que están por encima de los demás.
“Pensamos que nunca nos va a pasar nada y miramos la persona con limitación como que son enfermas, que ser amigo de un ciego o un sordo o estar cerca a una persona con autismo o síndrome de Down se nos va a pegar, aunque parezca increíble aún hay personas que piensan así en esta época”, dijo Clopatofsky Ghisays.
El mensaje también va a las empresas: “Hemos conocido casos de personas de talla baja que van a una entrevista de trabajo, pueden sacar los mejores resultados, pero al pedirle que se pusieran de pie y ver la estatura son rechazadas, un claro ejemplo de discriminación. Una de esas mujeres trabaja conmigo y es una excelente abogada”.
Agregó: “Tenemos que buscar esos cambios actitudinales, uno no le desea el mal a alguien, pero recuerden que nuestro cuerpo se va deteriorando”.
No obstante, reconoció que ha habido evolución también de otros: “Hemos avanzado bastante, eso es verdad, pero tampoco en estos años vamos a cambiar al mundo, ni siquiera Canadá que es un país super desarrollado, al igual que Estados Unidos y España han impulsado la política, pero reconocen que falta mayor impacto”.
Punto de partida
En la Constitución de 1991 quedaron por primera vez 4 artículos que hablan por vez primera de la persona con discapacidad.
6 años después se aprobó la primera ley —la ley 361— basada en los 4 artículos plasmados dentro de la Carta del 91, a partir de ese momento se empezó a tener un desarrollo más claro en el tema.
Cifras
El consejero presidencial afirmó en materia de cifras que en Colombia hay 205.000 niños con alguna discapacidad en las instituciones educativas, además reciben subsidio nacional.
“El número es muy significativo porque el 80 % de esta población vive en la pobreza, por ello no pagan un centavo por la matrícula y por supuesto hacen parte del PAE”.
Así mismo, del 20 % de la matrícula hipotética deben saldar se va a un fondo para favorecer a los maestros de apoyo, para la instalación de rampas y demás accesos, tecnología para los ciegos y sordos.
En materia de generación de oportunidades, hay 15.000 plazas de trabajo para ellos, “sin embargo nos falta más, pero creo que ya construimos esa política pública, es un punto de partida”.
Tomado de: https://www.cronicadelquindio.com/noticias/region/en-el-quindio-hay-actitud-para-trabajar-junto-con-personas-con-discapacidad